¿Alguna vez has pensado en lo difícil que es ser gay? Muchas personas creen (sobretodo los heterosexuales) que ser gay es solo tener una vida de parranda, de tener muchos hombres a la vez, de tener sexo sin control, drogas, alcohol y fiestas. PUES NO, ser gay no tiene nada que ver con eso, ya que ese tipo de vida lo puede llevar cualquiera sin importar su orientación sexual, eso depende de los principios de cada quien.
Bien! Comencemos, primero naces, como cualquier niño recién nacido, eres la adoración de tus padres y de la familia (en la mayoría de los casos), aun no logras discernir entre lo que esta bien y lo que esta mal, simplemente te preocupas por llorar cuando tienes hambre, cuando necesitas un cambio de pañal o tienes algún malestar. Así transcurren los primeros años de tu vida, en ese tiempo eres como una esponja, absorbiendo todo lo que ves y lo que te enseñan. Es en esta etapa en la que tus padres te inculcan valores, respeto, sinceridad honestidad entre otros que te regirán el resto de tu vida.
Te empiezan a decir que los niños tienen pene y las niñas tienen vagina. Que a los niños les gustan las niñas y a las niñas le gustan los niños, Ja! como si eso fuese a definir tu preferencia sexual. Si eres de familia religiosa, te empiezan a llevar a la iglesia, templo, salón, mezquita, sinagoga, etc... donde también te enseñan que casi todo lo que el hombre hace es pecado, ¿WTF? Sea cual sea la creencia o religión de cada uno, dudo mucho que al ser supremo (DIOS) le plazca que el hombre sea infeliz haciendo contra a su naturaleza.
Llegas a la edad promedio de 8 años (unos antes, otros después), pero llega ese momento en el que empiezas a sentir atracción hacia alguno de los dos sexos. Si te gusta el sexo opuesto, felicidades, tendrás una adolescencia plena y feliz (o al menos es lo que se pronostica). Si te atrae el mismo sexo, preparate, viene lo bueno.
Sigues creciendo, te llega la pubertad, sientes algo inexplicable, una gran atracción hacia tu mismo sexo, ¿Que me pasa?¿Que esta mal en mi?¿Que es esto que siento?. Comienza una batalla campal en tu interior, porque te enseñaron que lo que sientes es malo, es denigrante, es de enfermos, pero hagas lo que hagas no puedes dejar de sentirlo. Temes preguntar a alguien de tu familia por obvias razones, serás la vergüenza. Temes preguntar a tus amigos porque luego no vas a aguantar el "CHALEQUEO", ademas de que te van a dar la espalda. Decides guardar silencio e investigar por tu cuenta. Decides irte a internet, colocas la palabra "GAY" y te aparecen un millón de resultados, pero todos te redirigen al porno. Quedas atrapado por el porno y olvidas lo que en verdad estabas buscando, te masturbas y sientes esa terrible culpa que te carcome por dentro, tienes toda clase de pensamientos y hasta dices "Listo ya esta fue la ultima vez, de aquí en adelante voy a cambiar".
Hay otros arriesgados quienes si lo cuentan a su familia, algunos tienen suerte y los aceptan, pero la gran mayoría tienen que sufrir las consecuencias de sus actos. ¿Actos?¿Cuales Actos?¿En que momento me dieron a elegir quienes me iban a gustar, si los varones o las chicas?
Sea como sea continuas, ahora crecen los intentos por salirte de este mundo, si lo contaste te llevaron al psicólogo para que te "COMPUSIERA", y si no lo contaste sientes aun mayor el peso de la carga de tu preferencia. Incluso en ese vasto intento por "COMPONERTE" pruebas estando con personas del sexo opuesto. Sabes que no te satisface, pero al menos tu mente esta tranquila. Este punto es crucial en la vida, ya que en este punto, al llegar a la juventud, entre los 20 y 25 años deciden casarse, por cuidar las apariencias, solo por complacer al resto del mundo, sin importar que el precio sea sacrificar su propia felicidad. Damas que nos leen, si llegan a descubrir que su marido es gay, entiendanlos un poco, la presión a veces te hace cometer actos sin pensarlo.
Si no te casaste ¡Felicidades! Eres un sobreviviente (digo a la presión, no al matrimonio). Llega el momento en que te decides y se lo cuentas a tu familia o te descubren, la explosión en tu casa es de la misma magnitud como si lo hubieses hecho hace 10 años, con la diferencia que tienes mas edad para enfrentar a tu familia y defender tu posición. Dejas de asistir a la iglesia, templo, etc... Comienzas a juntarte con personas iguales que tu, personas que han pasado por situaciones similares, que te entienden, incluso puede que te enamores de alguno de ellos. Para tu familia siempre que salgas de tu casa estarás metido en una orgía, en un sauna, en una fiesta, en una reunión de drogadictos, cuando simplemente fuiste al cine y luego por un helado, pero no importa.
Sigues tu vida, siempre que te equivoques en algo te van a echar en cara que "ESO TE PASA POR NO SER NORMAL". Aprendes a eliminar esos comentarios de tu vida y seguir adelante. Sufres discriminación de la sociedad, en todos los aspectos, por el simple hecho de estar sentado en una mesa con tu pareja o enamorado mirándose romanticamente, sin ninguna clase de contacto físico, te tratan de marica y de degenerado y en muchos casos te cuesta hasta golpes y maltrato fisico. Te vienen muchas rupturas amorosas, te romperán el corazón mil veces (y esto es algo de lo que ningún humano puede escapar sin importar su preferencia sexual). Solo tus amigos gays están allí para consolarte, a tu familia ni sueñas con decirle nada, si no simplemente lloras en silencio y pasas tu dolor.
Los Treinta: en este punto de tu vida se divide en tres camino, dependiendo de lo que hayas hecho unos años atrás.
1. Si te casaste, ya estas pensando en el divorcio como opción (si es que ya no lo hiciste), por que no soportas la presión de estar con alguien que no ves como tu pareja, aunque sea la mejor persona del mundo.
2. Si se lo dijiste a tu familia, nada cambia, te siguen mirando igual, a menos que te hayas ganado el respeto con tus acciones. Confrontar a tu familia y darles semejante noticia es para valientes.
3. Si no fue ni la primera ni la segunda, pues ya entonces empiezan a sospechar, a tu edad y aun no te has casado, tus amigos ya todos tienen familia y tu no. Pero no te dicen nada, nadie se atreve a preguntar, pues ya eres un hombre maduro dueño de tus decisiones y no te pueden decir que hacer (al menos en teoría).
Llegan los sobrinos, los amas como si fueran tus hijos, los consientes y hasta darías la vida por ellos, siempre lo he dicho, padre no es el que engendra sino el que cría y ama.
Encuentras a esa persona especial, con la que por fin logras tener una relación estable, que se adapta a ti y tu a el, se quieren y se aman sus virtudes y defectos ¿suena como un sueño verdad? pero si pasa. El tiempo que dure dependerá de cada uno, Muchas de ellas duran para toda la vida. Con altas y bajas pero lo importante es saber sobreponerse a los problemas.
Siempre trata de ayudar a quienes vienen detrás de ti, a esos jóvenes que se encuentran pasando por alguna de estas etapas que ya tu pasaste en vez de "Joderles mas la vida".
Finalmente tu familia logró entender que las cosas por las que lucharon para cambiar toda la vida (respecto a ti) no lo lograron, te aceptan, te respetan, y poco a poco comienzan a aceptar a quien esté contigo, porque ven que es una buena persona, y no lo que ellos pensaban. "Familia es Familia, y la sangre llama".
Queridas familias que nos leen, si tienen algún miembro gay, piensen un poco en lo difícil que es ser gay, lo único que pedimos de ustedes es un poco de tolerancia, no importa si no comparten nuestro estilo de vida, pero por lo menos respeten nuestra posición, y dejemos los prejuicios a un lado, al final la familia es la familia y ya esta vida es lo suficientemente difícil.
Este relato no es ley de vida, no quiere decir que a todos les ocurre de la misma manera y dependerá de las decisiones que haya tomando en su vida, pero si una buena cantidad de personas se sentirá identificado con al menos un párrafo de este artículo. Fue realizado en base a la experiencia de diversas personas que han pasado ya por estas etapas de la vida.
