Lumbersexual, una montaña de excitación

Es un estilo que se basa en 3 grandes rasgos: barba poblada, camisa de cuadros y estilo desalineado, además de esto se puede añadir pantalones rasgados, botas todo terreno y cabellera larga cabe mencionar que poseen ciertas cualidades por lo cual los amaras:

Luro Bear

1. Son despreocupados: los osos que pertenecen a esta tendencia no se fijan demasiado en su apariencia, esto no quiere decir que sean sucios o descuidados, sino que andan a gusto como son, y no recurren a cosméticos o prendas para lucir diferentes.

2. Son muy varoniles: si te gusta el estereotipo del oso muy varonil, avasallador y seguro de si mismo, te vas a derretir con los lumbersexuales, pues ahí radica la esencia de su personalidad, ya que con ellos siempre te vas a sentir protegido.

3. Sus gustos no son tan exquisitos: los lumbersexuales se sienten como pez en el agua con una comida casera y sin muchos lujos, pues pueden ser espontáneos, pasar y hacerte pasar increíbles momentos, además, los lumbersexuales aman la naturaleza y no temen a convivir en ella sin las comodidades de las ciudades.

Los metrosexuales?...

Miguel Ortega

Recordemos que el término metrosexual se puso de moda allá por los noventa, años en los que tener cara de Hanson, rasuradita y lampiña, era el hit del momento. En realidad no había que buscarle mucho para darse cuenta de que era un ardid comercial para que la industria del cuidado de la imagen y la moda duplicara su mercado: ahora también se le podía vender cremas antiarrugas a los varoncitos y no tenía nada de malo que se fueran de repente a la cama de bronceado. Era bien visto que el muchacho fuera de comprar y combinara su guardarropa. Al hombre se le permitió abrazar su lado femenino sin poner en entredicho su masculinidad (¿?). Con unos pesitos de por medio, claro está.

Pero ojo: el lumbersexual no significa necesariamente la muerte del metrosexual. Una de las características del hombre metro es su preocupación por mantener una vestimenta bien combinada y trendy. Los lumbersexuales, por su parte, a pesar de parecer reivindicar al hombre feo, fuerte y formal, no engañan a nadie: se recortan los pelos de la cara en barberías de moda y no compran sus camisas en Waldos, sino en tiendas donde por un pedazo de franela a cuadros, les cobran lo que podría ser el equivalente al gasto semanal de una señora de colonia popular.

Lucho Bermudez

Es por ello que es muy común ver personas de este tipo dentro de la comunidad Osuna y pues a quien no le gusta ver a alguien grande fuerte con estilo desalineado como si no tuvieran ninguna preocupación que te lleve a un mundo de fantasías con solo ver su sensual y seductor atuendo, tu mente te lleva a volar a una cabaña con un leñador fornido y grande que te lleve a un punto de excitación con tan solo imaginar lo que puede suceder. Y es así como su palabra lo indica lumber proviene del inglés y significa leñador debido a que esta moda proviene de los hombres que cortaban leña con camisas de cuadros y no perdían tiempo en afeitarse y cuidar su imagen, sin embargo en la actualidad si tiene una higiene y un cuidado especial con su imagen pero sin quitarle lo mejor de esta tendencia lo rustico y varonil de un OSO que te provoque comértelo o porque no ser devorado como lo indica su ultimo termino SEXUAL.

 Si algún día deseas llevar este atuendo es aconsejable el uso de camisas de cuadros azul o roja entre abierta dejando al descubierto los vellos de tu pecho además de usar pantalones rasgados y tirantes marrones o negros y de esta forma lucir mucho más seductor varonil y atrapando miradas y deseos desenfrenados de pasión lujuria y sexo.

La próxima vez que vean a uno de estos barbones a cuadros en la calle, mírenlo bien y analícenlo: vean que nada en él está dejado al azar. Pero en este mundo donde las chicas se visten de enfermeras sexys o de mucamas francesas para provocar fantasías, ¿no es válido que los hombres levanten pasiones disfrazándose de hombres rudos?

Leo Sanchez

Porque afrontémoslo: a muchas (y muchos) les encanta este prototipo de hipermacho, aunque como Pimpón, nomás sean de cartón. Si ya desde los tiempos de Village People la hipermasculinidad caricaturizada era utilizada para alocar hormonas, podemos permitirles a los lumbersexuales sus 5 minutos de fama antes de que los rastrillos vuelvan a ponerse de moda, para beneplácito de los hirsutofílicos*.

*Hirsutofilia: es la parafilia que se refiere a la atracción por el vello androgénico (de hombre, pues).

Por: Kevin Gonzalez